Serie Lost Siren por Stephanie Hudson (+18)

1.- Ward's Siren

Yo solo era una analista de datos. Pagaba mis impuestos puntualmente. Solía darle de comer a un gato que no era mío y preparaba galletas para la oficina. Era una chica buena.

Entonces, ¿cómo es que mi recompensa fue acabar sin blanca, averiada y tirada en la cuneta con todo lo que poseía amontonado en la parte de atrás, y todo porque me perseguía la mafia? Pero, por otro lado, debía de quedarme algo de suerte, o él no se habría parado. 

Mi héroe misterioso. Un hombre tan guapo que me dejó sin aliento y lo reclamó como suyo, como un botín de guerra. Me pidió que subiera a su coche y me hizo sentir que se encargaría de todo. 

Desde luego, parecía más que capaz. Tanto por su intimidante envergadura como por la forma en que estaba sentado en el asiento trasero de su caro coche, con un aire más de señor de una mansión, simplemente irradiando poder. Pero también había algo peligroso en él. 

Algo oscuro y oculto, justo bajo la superficie. La forma en que su mirada ardiente se clavaba en mí, como si tuviera el poder de desnudarme y mirar en lo más profundo de mi alma para así juzgar su valor por sí mismo. 

Por eso le había dicho que no. Una respuesta que, por lo visto, no estaba acostumbrado a recibir. Pero, en lugar de enfadarse, se limitó a esbozar una sonrisa ladina y decirme que tenía el presentimiento de que volvería a verme. 

Que el destino intervendría. 

Y que, cuando lo hiciera... reclamaría a su sirena perdida.

2.- Eden's Enforcer

Bueno, parecía que mis días como analista de datos habían quedado muy atrás. Parecía que también lo era dar de comer a gatos ajenos y hornear galletas para los compañeros de trabajo. 

Lo que no había quedado atrás, sin embargo, era que la mafia me secuestrara o encontrarme atada a otra silla más. 

Pero esta vez la mafia había cometido un grave error. Porque esta vez, no eran ellos los que más miedo daban. No… pero yo sabía quién sí. 

Él, que me había reclamado como suya. 

Él, que me quería de vuelta. 

Él, que ahora estaba sediento de sangre. 

El sicario de una sirena.

3.- Wrath's Siren

Escribir tus sueños… sonaba bastante inofensivo, ¿verdad? 

Resultó que se me daba bastante bien. Resultó que era un buen libro. Porque quién iba a decir que se podía ganar dinero escribiendo sobre el hombre de tus sueños. ¿Quién iba a decir que sería rentable fantasear con un personaje ficticio del que te habías enamorado? 

Pero sobre todo, quién iba a decir que un día se abrirían puertas y descubrirías que no era ficticio en absoluto. Que era real. 

No tenía ni idea de que escribir pudiera ser tan peligroso, pero cuando escribes sobre un Señor Demonio, un Ejecutor llamado Kaiden Wrath, todo era posible. 

Como soñar con él en apuros y saber que eres la única que sabe cómo salvarlo. La única que puede salvar al Demonio con el que estás obsesionada. 

Ahora solo tenía que encontrarlo y salvarme rápidamente de... la ira de un demonio.

4.- Emme's Enforcer

Intenté esconderme de la verdad y no funcionó. Intenté huir de él, y eso, desde luego, no funcionó. Así que, ¿qué me quedaba por hacer si no intentar cumplir mi castigo? 

Un castigo que terminó conmigo sacrificando mi propio corazón en el instante en que su Sirena Perdida por fin entró en su vida. La que yo misma le encontré. Esa era mi señal para marcharme. 

Mi señal para huir y no mirar atrás jamás. Ese había sido el plan y la promesa que me hizo… dejarme marchar. Una promesa que no tardó en romper. Porque Kaiden Wrath no era el tipo de Sicario que deja escapar lo que quiere, y lo que él quería… era a mí. 

La Autora de su historia. Pero ahora, quedaba la pregunta más importante de todas: ¿Sería nuestro final el «y vivieron felices para siempre» que mi corazón anhelaba o estaba condenado a ser…?

5.- Greed's Siren

La vieja historia de odiar mi trabajo no era ninguna novedad. Mucha gente la vivía. Mucha gente la había experimentado. Así que ir a trabajar ese día se sintió como cualquier otro temido día en la oficina. 

Hasta que apareció él. 

Un ladrón que esa noche robó algo más que oro. Un ladrón que me robó el corazón. Pero estaba a punto de descubrir lo arriesgado que era aquello en realidad. Porque Ryker Wyeth no era un ladrón cualquiera. 

Era de los peligrosos. Y ahora, después del caos que desató sin saberlo en mi vida esa noche, solo me quedaba una opción… Huir. Huir de mis crímenes. Huir del recuerdo imborrable de su beso. 

Sin embargo, había un problema con ese plan. Ryker Wyeth era avaricioso y quería más. Y este peligroso ladrón nocturno… Siempre conseguía lo que quería. Y ahora, lo que quería, era a mí. 

Lo que significaba que no solo huía de la ley, sino que ahora también huía de…